
«Solo Dios sabe quién será el nuevo papa»
- ALERTA!Caballero de DíaNoticias
- 6 de mayo de 2025
- 212
Guillermo Marcó, sacerdote, dialogó con Roberto Caballero y el equipo de Caballero de Día (AM 530, Somos Radio, lunes a viernes de 8 a 10hs), sobre el cónclave que definirá al sucesor de Francisco en el Vaticano. “En realidad nadie sabe nada de lo que va a pasar, solo Dios”, resumió.
En medio de especulaciones y nombres que suenan en la prensa italiana, Marcó subrayó que más allá de las candidaturas visibles, “hasta que no aparezca el nuevo Papa en el balcón, no va a haber anuncio de quién es el elegido”. Destacó que la elección no se limita a continuar el legado de Francisco, sino que se trata de una decisión mucho más trascendental: “Un cardenal de la Iglesia Católica no está eligiendo solo al sucesor de Francisco, sino al sucesor de San Pedro”.
Entre los 132 cardenales que participarán del cónclave, figuran cuatro argentinos con posibilidad de voto: Víctor Manuel Fernández, actual prefecto para la Doctrina de la Fe; Mario Poli, arzobispo emérito de Buenos Aires; Ángel Sixto Rossi, arzobispo de Córdoba; y el más reciente, el cardenal Bocalik, obispo de Santiago del Estero. Según Marcó, el hecho de que haya argentinos no significa que necesariamente uno de ellos deba ser elegido: “Podría ser, pero no es costumbre. La Iglesia mira otras cosas”.
Respecto a las tensiones internas en la Iglesia y algunas críticas al pontificado de Francisco, el sacerdote señaló que “la Santa Sede siempre tuvo como tarea ser el límite, la respuesta a las preguntas. Roma hablaba y se terminaba la discusión”. En cambio, el Papa argentino eligió una mirada más pastoral y cercana al pueblo: “Francisco no encaró precisamente ese rol. Prefirió recordar que todos somos hijos de Dios y hablar de una Iglesia para todos. Eso generó confusión en quienes esperaban definiciones tajantes”.
El procedimiento del cónclave, explicó Marcó, puede extenderse todo lo necesario hasta alcanzar un acuerdo. Si después de varios días no hay consenso, se establece un retiro espiritual obligatorio para los cardenales, y se reduce la votación a los dos más votados. A partir de allí, se define por mayoría simple: “Ahí ya tenemos fumata blanca”, aclaró.
Sobre la figura de Jorge Bergoglio y su transformación al convertirse en Francisco, Marcó recordó al obispo cercano a las villas y a los presos, y cómo ese compromiso lo llevó al centro del catolicismo mundial: “Lo cambió la perspectiva. Ya no dialogaba con políticos argentinos, sino con los poderosos del mundo”. También resaltó su impulso al diálogo interreligioso y su sensibilidad por los pobres: “Aquí en Roma habilitó baños y peluquerías para personas en situación de calle. Es un mandato evangélico, no es ni progresista ni conservador: es simplemente lo que enseña Jesús”.
Mientras el mundo espera al próximo Papa, Marcó lo resumió con claridad: “El que venga será el que Dios elija para el momento que toca venir”.