
Trump: diez días que estremecieron al mundo
- ALERTA!Bonavitta 530Noticias
- 4 de abril de 2025
- 87
Columna de Martín Piqué
Como cada viernes en Bonavitta en 530 (AM 530 – Somos Radio, lunes a viernes de 12 a 14), Martín Piqué realizó su columna «Dame una historia», que en esta ocasión llevó el título «Trump: diez días que estremecieron al mundo». El periodista propuso una lectura del presente internacional desde una clave histórica, tomando como punto de partida el libro Diez días que conmovieron al mundo, del periodista estadounidense John Reed, que cubrió in situ los inicios de la revolución rusa. “Una de las cosas que escribe en ese hermoso libro de no ficción es una sensación de que cada día no se sabía cómo iba a terminar y qué iba a ocurrir al día siguiente”, señaló Piqué, y trazó un paralelismo con la actualidad global, marcada por una aceleración de cambios profundos: “Eso es lo que nos genera esta sensación del presidente de la superpotencia global anunciando lo que ya todos veíamos que estaba ocurriendo: que la globalización como reglas y las instituciones de la globalización ya no le sirven a Estados Unidos”.
A partir de este diagnóstico, Piqué recomendó una vez más el libro La derrota de Occidente del intelectual francés Emmanuel Todd, que viene generando impacto en distintos círculos del pensamiento crítico. “Uno de los párrafos de ese libro, textual, es este que voy a leer ahora y que me parece que explica un poquito lo que está pasando con la Argentina”, anticipó, y leyó: “En la medida en que el sistema estadounidense contra en todo el mundo, tendrá un peso cada vez mayor en sus protectorados originales, que son sus bases últimas de poder”. El periodista recordó que esa obra fue una de las lecturas del verano de María Eugenia Ludueña, madre de Florencia Kessler, y que también fue reseñada por Eric Calcagno. “En definitiva, Estados Unidos está en declinación, ya no le sirven las reglas que él mismo impulsó con Bretton Woods, con la aparición del Fondo Monetario Internacional, otros organismos multilaterales en materia económica y comercial y también, por qué no decirlo, las Naciones Unidas”, agregó.
Piqué vinculó este contexto con la situación de la Argentina y la disputa geopolítica entre Estados Unidos y China, en la que nuestro país ocupa un lugar subordinado y de creciente presión. Mencionó una reciente declaración de Mauricio Claver Carone, exfuncionario del Departamento de Estado y expresidente del BID, quien señaló: “Vamos a ayudar a la Argentina, pero queremos que la Argentina no prorrogue el swap de monedas con China”. Según explicó el periodista, ese pedido fue interpretado por varios diplomáticos como una forma de condicionamiento geopolítico: “Lo que Estados Unidos plantea, en la boca de Claver Carone, es que hay una cuestión extorsiva de parte de la República Popular China con Argentina a través del swap de monedas”.
Sobre esta disputa, Piqué citó una conversación con Sabino Vaca Narvaja, exembajador argentino en China, quien aseguró que en esta etapa “vamos a ver niveles de subordinación nunca antes vistos en la historia argentina”. También recordó que Claver Carone tiene una antipatía personal con el actual jefe de Gabinete Guillermo Francos, producto de un escándalo en el BID. “Por eso hay una inquina importante de Claver Carone con este funcionario argentino”, explicó. Además, señaló que el swap con China, que representa cerca de 20.000 millones de dólares en yuanes, vence en 2026, pero ya se usaron 5.000 millones para pagar importaciones y en junio debería abonarse una parte prorrogada.
Para cerrar, Martín Piqué retomó la idea inicial del desconcierto como marca de época: “Está claro entonces que la asociación que imagina Milei con Estados Unidos implica asumirse como protectorado, ni siquiera como colonia, sino una neocolonia”. Y advirtió que la velocidad de los cambios impone una nueva disposición política: “Tenemos que estar preparados para sorprendernos día a día, sin saber lo que puede ocurrir al día siguiente. Lo que nos parecía imposible hace un año, hoy ya no parece tan improbable, y quizás dentro de tres meses estemos viviendo algo que ni siquiera hoy nos podíamos haber imaginado”.