«Los escándalos de corrupción le generaron a Milei un quiebre en su base electoral más dura»

El director de la consultora Proyección, Santiago Giorgetta, habló con Un buen comienzo acerca del impacto político de los casos de corrupción que rodean al gobierno y cómo esa situación afectó la imagen presidencial y la composición de su electorado.

Giorgetta señaló que “los escándalos que involucran al entorno más cercano de Javier Milei generaron un quiebre muy fuerte dentro de su base electoral más dura”, y explicó que el mandatario “mutó su núcleo de apoyo: perdió sectores populares y jóvenes, y hoy conserva sobre todo a hombres mayores de 50 años de nivel socioeconómico medio y alto, sensibles a los hechos de corrupción”.

En diálogo con María Quinteros y Nicolás Lantos, el analista sostuvo que el gobierno “llega a las elecciones en una situación de debilidad evidente” y que “las maniobras de control del conteo o las sospechas previas al voto son reflejo de ese deterioro político”.

“El domingo 26 el gobierno va a tener que explicar cómo ese apoyo social que decía mantener intacto después del ajuste más grande de la historia se le esfumó”, afirmó. Según el consultor, “Milei ya no cuenta con el respaldo de los sectores populares que en su momento creyeron en su discurso antisistema, pero que hoy sufren las consecuencias del ajuste y de la crisis económica”.

Giorgetta detalló que en distritos donde el oficialismo había obtenido resultados históricos, como Córdoba o Santa Fe, “ahora enfrenta escenarios de paridad”. “En Córdoba, Milei había sacado el 75% en el balotaje y hoy pelea voto a voto con Llaryora. En Santa Fe pasa lo mismo. Solo en la Ciudad de Buenos Aires puede imponerse con claridad, aunque con porcentajes más bajos que los esperados”, explicó.

El analista también destacó que la corrupción “volvió a ser un tema central” para la ciudadanía. “Más del 50% de los encuestados menciona los casos de corrupción como una de las principales preocupaciones del país. Escándalos como el del 3% de Karina Milei, el ‘narcoescándalo’ con Espero o el caso Lemoine golpearon directamente la credibilidad del presidente”, señaló.

“Milei siempre defendió a todos los implicados, incluso frente a las pruebas. Esa actitud, más la falta de resultados económicos, deterioró su relación con una parte del electorado que lo veía como distinto a la vieja política”, concluyó Giorgetta.