«La “modernización laboral” no crea empleo, destruye derechos»

La diputada nacional y secretaria general de FE-SITRAJU, Vanesa Siley, advirtió en Siempre es hoy que la reforma impulsada por el Gobierno “provocó una pérdida masiva de puestos de trabajo y empresas”, cuestionó la Ley Bases y sostuvo que “sacar derechos nunca generó empleo registrado”.

La diputada nacional de Fuerza Patria y secretaria general de la Federación de Sindicatos de Trabajadores Judiciales (FE-SITRAJU), Vanesa Siley, aseguró que la denominada “modernización laboral” promovida por el oficialismo “no solo no creó empleo, sino que destruyó derechos y profundizó la precarización”, al analizar los primeros meses de vigencia de la Ley Bases.

En diálogo con el programa Siempre es hoy, Siley afirmó que desde la asunción de Javier Milei “se perdieron más de 280.000 puestos de trabajo registrados, entre el sector público y el privado, y desaparecieron más de 20.000 empresas”, según datos de la Superintendencia de Riesgos del Trabajo. “Es empleo registrado el que se destruyó, no estamos hablando de estadísticas marginales”, remarcó.

La legisladora cuestionó los argumentos utilizados para justificar la reforma laboral incluida en la Ley Bases y recordó que “la ampliación del período de prueba, la figura del ‘colaborador’ y la eliminación de sanciones por trabajo no registrado fueron presentadas como generadoras de empleo”. “Nunca sucedió. No pasó en los ’90 y no pasa ahora”, subrayó.

Siley sostuvo que la caída del empleo responde al modelo económico y no a la legislación laboral. “En una economía sin consumo, con salarios pulverizados, ningún empleador va a contratar, aunque le quiten todas las obligaciones”, afirmó. En ese sentido, señaló que “creció el monotributo porque es casi la única forma de subsistencia que queda, pero eso no es empleo de calidad”.

La diputada también advirtió sobre el aumento de la informalidad laboral, que ubicó en torno al 43%, y rechazó el discurso oficial que plantea una supuesta mejora para quienes están fuera del sistema. “Cuando bajan los derechos de los que están registrados, los informales caen todavía más. Esa es otra falacia que hay que desarmar”, indicó.

En el plano parlamentario, Siley cuestionó el recorrido legislativo de los proyectos del Gobierno y alertó sobre posibles inconstitucionalidades, al señalar que iniciativas con impacto fiscal “deberían iniciarse en la Cámara de Diputados”. Asimismo, anticipó que el bloque opositor trabaja en un dictamen propio para enfrentar la reforma.

Finalmente, planteó la necesidad de discutir una agenda alternativa centrada en las necesidades actuales de los trabajadores. “Hoy las prioridades son ingreso, tiempo y salud física y mental. Desde ahí hay que construir derechos, no desde un escritorio”, concluyó.