«El fallo es inadmisible y está en línea con los intentos de desandar los avances de la justicia»

La doctora en Psicología y sobreviviente de la dictadura cívico militar, Ana María Careaga, afirmó que el fallo que otorgó la libertad condicional al torturador Eduardo Kalinec, “es inadmisible y está absolutamente en línea con todos los intentos de desandar las políticas públicas de memoria y en particular los avances de la justicia”.

En diálogo con Caballero de Día, la militante de derechos humanos e hija de Esther Balestrino de Careaga, una de las fundadoras de Madres de Plaza de Mayo, sostuvo que “acá en la Argentina la tríada Memoria, Verdad y Justicia tuvo en la justicia el estatuto de lo no negociable y efectivamente, fue ejemplar todo lo que se avanzó en materia de justicia”.

“También debemos decir que apenas queda un puñado de represores, y que, si bien toda la represión y todos estos represores fueron parte de un sistema concentracionario, muchos de los que quedan presos de alguna manera representan un símbolo de la represión. Y creo que, en el caso particular de Kalinec, por su brutalidad y también porque reivindica los hechos” de los que fue protagonista destacó Careaga.

Respecto del impacto que ocasionó este fallo en las víctimas, Careaga señaló que “si uno califica los delitos de la humanidad como imprescriptibles, es decir, que no tienen vencimiento en el tiempo, en estas audiencias se escucha también que los efectos traumáticos, los defectos en la subjetividad tampoco tienen vencimiento en el tiempo”.

“Entonces, que hagan pasar a cada una de las personas para contar sus experiencias y que después, cuando es unánime la posición de todas las víctimas de que no están de acuerdo con que se les otorguen beneficios, porque además, los delitos de lesa humanidad ofenden, no solamente a las víctimas, sino al conjunto de la sociedad, lesionan, ofenden la condición humana y por lo tanto no deberían tener ningún tipo de beneficios”.

El Tribunal Oral en lo Criminal Federal N° 2 ordenó este 22 de diciembre la «inmediata soltura» de Eduardo Emilio Kalinec, el expolicía que operó como interrogador y torturador en los centros clandestinos de detención Atlético, Banco y Olimpo.