EE.UU. exige más interlocutores, pero excluye a Macri

El apoyo incondicional de Washington plantea la unidad política para asegurar la continuidad de las políticas de ajuste.

Por Fabián Waldman.

“Ya vas a ver que se va a concretar, no nos estarían dedicando tanto tiempo”. La respuesta hace 20 días de una persona cercana al Triángulo de Hierro adelantaba la confianza en la resolución “positiva” para el gobierno.

Santiago Caputo estuvo reunido con Barry Bennet, un lobista cercano a Donal Trump,  en tres oportunidades en las últimas 48 horas. Este embajador sin cartera había visitado al asesor monotributista en más de una oportunidad desde la llegada al gobierno de Javier Milei.

“Nadie hace eso si no te quiere ayudar”, señala nuestro interlocutor que revela el motivo específico del interés norteamericano en el tuit de Scott Bessent.

El secretario del Tesoro de los EE.UU. llevó adelante una agresiva política de apoyo hacia nuestro país. Había viajado a la Argentina por unas horas y aseguró el acompañamiento incondicional a la Argentina en una conferencia conjunta con el ministro de Economía el 14 de abril pasado.

“Revisamos el amplio consenso político en Argentina para la segunda mitad del mandato del presidente @JMilei”. Esta frase de Bessentt es la subrayada por nuestra fuente, quien además remarca que Bennett les había adelantado ese pedido expreso para lograr la gobernabilidad.

«Me alentó su enfoque en lograr una libertad económica fiscalmente sólida mediante la reducción de impuestos, el aumento de la inversión, la creación de empleo en el sector privado y la colaboración con aliados”. Este otro párrafo de Bessent es en lo que se encuentra trabajando el líder de las Fuerzas del Cielo.

“Como dice en esa frase, tenemos que trabajar con los aliados en las reformas que Argentina necesita. Estamos en eso”. La sentencia del entornista alude a la sesión de ayer en la Cámara de Diputados. En ella consiguió recuperar el respaldo de sectores con los cuales el diálogo estaba cortado hace unos meses.

A la demostración de músculo político le siguió la integración de estos interlocutores que permitieron impedir el avance la oposición con la Ley de DNU a las conversaciones con Bennett.

“Con (Mauricio) Macri no. No les interesa eso”. Sin revelar cuales fueron los otros interlocutores, nuestro entornista descartó de plano la participación del ex Presidente en esas conversaciones. Santiago Caputo no tiene diálogo ni milanesas con Mauricio Macri hace tiempo, inclusive cerca de él marcaban el asombro por el nuevo acercamiento al Presidente de las últimas dos semanas.

“No es una cuestión de costos. Es una alianza geopolítica estratégica y por lo tanto estamos en constante diálogo y nos están ayudando en todos los frentes”. El respaldo conseguido esta tarde desde los EE.UU. solo tiene hasta este momento esta definición de parte de la Casa Rosada.

Aunque la realidad marca la venta de industrias como IMPSA a una empresa norteamericana, la disolución del Plan Nuclear y la participación de emprendimientos privados en el sector energético. También la posibilidad de poner en venta INVAP, fuerte competidor en el mercado internacional en la construcción de satélites. Las declaraciones de los propios funcionarios norteamericanos contra la influencia China en nuestro país, desde la Estación Espacial en Neuquén pasando por la construcción e las represas en Santa Cruz hasta el swap concedido y renovado por China.