«Milei: espejito, espejito…»

Editorial de Felicitas Bonavitta

La periodista y conductora Felicitas Bonavitta criticó con dureza al presidente Javier Milei en su editorial de este jueves, donde advirtió sobre un creciente clima de hostigamiento a la disidencia, el uso discrecional de los fondos de inteligencia y un avance hacia prácticas autoritarias.

Bajo el título “Milei: espejito, espejito…”, Bonavitta comparó al jefe de Estado con un personaje encerrado en un mundo de adulaciones, donde las voces críticas son atacadas o silenciadas. “Milei quiere escuchar solo eso, lo que tiene para decirle su espejito”, afirmó, aludiendo a medios, redes y operadores que refuerzan su discurso.

En ese contexto, alertó sobre lo que definió como una “fase dos” en la estrategia del gobierno, que incluiría inteligencia interna contra opositores, periodistas, artistas y ciudadanos. “Ya no se trata solo de agresiones verbales en redes o insultos del propio presidente; ahora entra en escena la SIDE”, señaló.

Según la periodista, el presupuesto de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) —dirigida por un hombre cercano a Santiago Caputo— aumentó un 68% en los primeros meses del año, con un incremento del 254% en gastos reservados. Bonavitta citó una filtración publicada por el diario La Nación, que indicaría la existencia de un plan para identificar y monitorear a actores sociales vulnerables y voces críticas de la política económica del Ejecutivo.

“Esto es una avanzada autoritaria. Los libertarios más estalinistas en el peor sentido del estalinismo”, sostuvo Bonavitta, quien también cuestionó el rol de la Comisión Bicameral de Fiscalización de los Servicios de Inteligencia, presidida por el senador Martín Lousteau. La periodista deslizó que parte de las filtraciones podrían haber provenido de ese ámbito.

En su análisis, advirtió que la SIDE estaría habilitada para actuar en defensa de “la relación especial con Estados Unidos e Israel”, y calificó de “vergonzoso” lo que describió como un “fascismo cipayo”: autoritario, pero sin contenido nacionalista.

La editorial cerró con un señalamiento a la creciente polarización y el uso de redes sociales para estigmatizar a opositores. Bonavitta mencionó retuits del presidente a cuentas que promueven discursos de odio, como “Reventá Kicillof comunista”, en lo que interpretó como una legitimación de la violencia simbólica desde el poder.

“El gobierno de Javier Milei está instaurando el miedo para acallar críticas. Todavía hay quienes objetan si es autoritario. Lo es, con claros tintes fascistas”, concluyó.