Una ofensa al pueblo argentino

En su habitual editorial en Caballero de día, Roberto Caballero reflexionó sobre las declaraciones de Donald Trump y el impacto político y simbólico de que un expresidente de Estados Unidos se atreva a decirle al pueblo argentino cómo votar.

El periodista y conductor Roberto Caballero calificó como “una ofensa real y concreta al pueblo argentino” las declaraciones de Donald Trump, quien pidió públicamente que Javier Milei gane las próximas elecciones. En su editorial de Caballero de día, el periodista advirtió que el exmandatario estadounidense “se animó a tanto porque vio delante de sí a un gobierno sumiso, complaciente y sin dignidad nacional”.

“Trump no humilló a Milei, humilló al pueblo argentino. Ordenarle a un país cómo tiene que votar desde la nueva Roma es una ofensa directa a nuestra soberanía”, afirmó Caballero. Y agregó: “Sólo se anima porque la comitiva que lo representa y mal al pueblo argentino no lo defiende”.

El periodista consideró que lo ocurrido “deja al descubierto la pérdida de autoestima nacional” y que las elecciones de octubre deben servir “para recuperar algo del orgullo colectivo quebrado”. “Si los argentinos eligieron a este gobierno es porque están rotos. El neoliberalismo se encargó de romperles la calidad de vida, la idea de futuro y hasta de convencerlos de que no merecen lo que alguna vez tuvieron”, sostuvo.

Caballero sostuvo que el gesto de Trump “fue un trato humillante al país entero” y recordó que el mandatario libertario “actuó como un edecán del poder estadounidense”. “Milei dejó de representar al pueblo argentino. No lo defiende ni siquiera cuando lo humillan”, subrayó.

“Este es un gobierno arrodillado frente a Estados Unidos y también frente a cualquier mafioso que traiga un puñado de dólares. No respeta a los jubilados, ni a las personas con discapacidad, ni a los trabajadores. Se fija sólo en los mercados”, dijo el periodista, que advirtió sobre el riesgo de “entregar lo poco que queda de autoestima nacional a cambio de un camión de dólares del narcotráfico o del contrabando”.

Para Caballero, lo sucedido “debería ser un parteaguas” en la política argentina. “Nadie en el mundo nos va a respetar si nosotros no nos respetamos primero. Si el presidente baila frente al poder extranjero, no hay motivo para que Trump o cualquiera nos tome en serio”, expresó.

“Trump está bien que quiera a su país. Lo que necesitamos nosotros es volver a querer a la Argentina. La patria tendría que sonarnos en el pecho cada vez que la nombramos. Si eso no pasa, nos merecemos a Milei. Pero todavía hay reservas para rebelarnos ante esta realidad. Patria sí, colonia no”, concluyó Caballero.