
Si Ongaro los viera
- Caballero de DíaColumnas
- 11 de abril de 2025
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Editorial de Roberto Caballero
En su editorial del viernes en Caballero de Día (AM 530, Somos Radio), el periodista Roberto Caballero analizó el paro nacional convocado por la Confederación General del Trabajo (CGT), la Central de los Trabajadores Argentinos (CTA) de los Trabajadores y la CTA Autónoma, que tuvo lugar este jueves.
“La jornada de huelga de ayer, convocada por la CGT, la CTA de los Trabajadores y la CTA Autónoma, deja mucho para analizar. Fue una medida de fuerza que buscó expresar el descontento de las y los trabajadores ante las políticas del actual gobierno”, señaló Roberto Caballero en el inicio de su editorial radial de este viernes.
El periodista consideró que, a pesar de los intentos de sectores alineados con el oficialismo por obstaculizar la huelga, “el paro logró un nivel de adhesión significativo”. Uno de los ejemplos que mencionó fue la actitud de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), a la que calificó como un caso de “sindicalismo violeta”.
Caballero destacó la contundencia del paro en sectores clave como los petroleros de Vaca Muerta, los metalúrgicos y los trabajadores estatales organizados en ATE, y subrayó: “Resulta impensado, en otro momento de nuestra historia, ver la indisciplina de un gremio clave para el éxito o el fracaso de una medida de fuerza. Y sin embargo, sucedió”.
También hizo referencia al escenario ferroviario: “La Fraternidad adhirió mientras que en la Unión Ferroviaria persiste una mirada más cercana a las privatizaciones”.
En ese contexto, Caballero recordó al histórico dirigente sindical Raimundo Ongaro, líder de la CGT de los Argentinos: “Fue una excepción: peronista, católico, comprometido con un sindicalismo con proyecto de país. No golpeaba para negociar. Entendía que sin una articulación con sectores medios, intelectuales, trabajadores culturales y pequeños empresarios, no había salida nacional”.
En contraste con esa época, señaló que hoy “la conciencia de clase está más difusa” y cuestionó que muchos trabajadores no se perciben como tales. “Se ven como emprendedores, cuenta propistas, o simplemente no quieren saber nada con los sindicatos. Pero sigue existiendo una identidad del trabajo, que va más allá de la afiliación o del empleo formal”, aseguró.
Según el periodista, esa identidad “se expresó ayer en las calles, en los lugares de trabajo, en el silencio de quienes no fueron a trabajar”.
“El gobierno militó activamente para que el paro fracasara. No lo logró. Sí quebró una parte del sindicalismo, pero no consiguió doblegar a la mayoría”, afirmó Caballero. “Perder el presentismo, cerrar un comercio, dejar de facturar, no es fácil. Aun así, muchas y muchos eligieron parar”, añadió.
En otro pasaje, cuestionó el “estigma sobre el sindicalismo, fabricado y reproducido por los grandes medios”, y lo comparó con el que pesa sobre figuras como Cristina Fernández de Kirchner o la agrupación La Cámpora.
“El paro fue exitoso no solo por la adhesión, sino por lo que expresó: una dignidad intacta en quienes viven de su trabajo. No importa a quién hayan votado. No importa si repiten prejuicios. Cuando se cruzan las miradas entre quienes trabajan, hay algo que se reconoce: el valor del trabajo, el peso de lo que se produce, el alma de esta Nación”, concluyó.