
Se profundiza la brecha de género
- Caballero de DíaColumnas
- 11 de marzo de 2025
- 44
Columna de Natalia Salvo
En su columna habitual en Caballero de Día (AM 530, Somos Radio), la abogada laboralista Natalia Salvo analizó el impacto del ajuste neoliberal sobre las mujeres y disidencias, destacando cómo las políticas del actual gobierno profundizan la brecha de género.
«Venimos de un 8M con muchos índices y cifras que evidencian cómo este ajuste neoliberal tiene un sesgo de género; es decir, lo sufren y padecen en mayor medida las mujeres y las disidencias. Ahora bien, ¿por qué sucede esto?», dijo Salvo al inicio de su columna.
Para Salvo, «este gobierno ha negado sistemáticamente cualquier desigualdad estructural, ya sea de trabajadores, jubilados o especialmente de las mujeres. Se ha posicionado radicalmente en contra de la justicia social y el feminismo».
La abogada subrayó que «negar la desigualdad estructural no solo implica retrocesos, sino que también profundiza esas desigualdades. En derecho hay un principio básico: si se trata a los desiguales como iguales, se amplifican las diferencias. La igualdad ante la ley es un punto de llegada, no de partida, y se consigue a través de la intervención del Estado».
En ese sentido, puso como ejemplo la situación de Bahía Blanca tras la catástrofe reciente: «El mercado no va a reconstruir la ciudad tras la catástrofe. Lo mismo ocurre con los derechos sociales. Como mencionó Cristina Fernández de Kirchner en múltiples ocasiones, los derechos se financian con el aporte de todos y todas».
Sin embargo, advirtió que «este gobierno eliminó el Ministerio de la Mujer y diversos programas de asistencia, educación y salud, lo que incrementó la sobrecarga de tareas de cuidado sobre las mujeres. Cuando el Estado se retira, no solo es una decisión política: significa que las mujeres deben asumir más responsabilidades en el hogar, en los comedores comunitarios y en la educación».
Los datos reflejan el impacto del ajuste en la participación laboral de las mujeres: «La tasa de actividad de las mujeres bajó en el primer año del gobierno de Milei. Actualmente, la tasa de ocupación femenina es del 52,1%, un 18,4% menor que la de los varones, que es del 70,5%».
Según Salvo, «esto responde a patrones económicos, sociales y culturales sedimentados. La desigualdad no está escrita en la ley, sino en la estructura misma de la sociedad. Las mujeres suelen trabajar en jornadas parciales debido a las tareas de cuidado, deben estar más capacitadas para acceder a cargos incluso inferiores a los de sus pares varones, se enfrentan al piso pegajoso en los empleos menos valorados y al techo de cristal en posiciones de mando».
En relación con el acceso al poder, destacó: «Se asocia el liderazgo con los hombres: si un varón ejerce autoridad, es poderoso; si lo hace una mujer, es loca».
El ajuste también se refleja en la violencia mediática, según la abogada, quien recordó que «hoy se conmemora el Día de la Lucha contra la Violencia Mediática, un tema abordado en la Ley 26.485 de Protección Integral a las Mujeres».
Por otro lado, explicó que «la feminización de las tareas implica que ciertos trabajos se asignan casi exclusivamente a mujeres, reflejando roles tradicionales del hogar. Ejemplos claros son la docencia y la enfermería, sectores donde las mujeres predominan por la supuesta sensibilidad que se les atribuye».
El presidente Javier Milei «no solo niega estos problemas en la agenda 2030, sino que rechaza sistemáticamente la existencia de la brecha de ingresos y la brecha salarial. Pero los datos son elocuentes: la brecha salarial es del 28,4%, la brecha entre trabajadoras registradas e informales es del 21,4%, y seis de cada diez personas en el decil más pobre de la sociedad son mujeres».
A la inversa, se produce la «masculinización de la riqueza»: «Tres de cada cuatro contribuyentes alcanzados por el impuesto a las ganancias son varones (65,4%), mientras que solo el 24,6% son mujeres. No solo es necesario discutir la pobreza, sino también la concentración de la riqueza».
El poder adquisitivo de las trabajadoras de casas particulares, un sector feminizado en un 98,7%, «cayó un 21,8% desde noviembre de 2023. Además, se han perdido 15.748 puestos de trabajo en este rubro desde la asunción de Milei».
Otro golpe a las políticas de género fue el recorte al programa Acompañar, «destinado a mujeres y diversidades en situación de violencia de género. Su poder adquisitivo cayó un 29,8%, se redujo el período de protección de seis a tres meses y ahora exige denuncia policial para acceder».
Finalmente, la abogada alertó sobre la inminente eliminación de la moratoria previsional para jubiladas: «Esto significa que nueve de cada diez mujeres no podrán jubilarse, ya que no se reconoce su labor de cuidado ni el alto nivel de informalidad en el trabajo doméstico».
«Cuando hablamos de desigualdad estructural de género y diversidad, nos referimos a que la vida de las mujeres es más precaria, que deben endeudarse más para sostener el hogar y que sus salarios han pasado de ser de subsistencia», concluyó Salvo. «Este modelo neoliberal que ajusta de manera brutal es aún más cruel con las mujeres y las disidencias».