“La reforma laboral del gobierno promueve la esclavitud”

La secretaria adjunta del SiTraRepA, María Belén D’Ambrosio, dialogó con Un buen comienzo sobre el impacto de la reforma laboral en los trabajadores de plataformas, denunció una avanzada de precarización extrema del empleo y advirtió que el proyecto oficial “legaliza la esclavitud del siglo XXI”.

D’Ambrosio sostuvo que el Gobierno “promueve abiertamente la precarización laboral” y que la reforma apunta a “blanquear un sistema de superexplotación” que ya padecen los repartidores. “No tenemos ningún derecho laboral, trabajamos a destajo como en el siglo XIX, sin ART, sin seguro de vida y con ingresos miserables. Tenemos compañeros que mueren trabajando y no hay ninguna cobertura”, remarcó.

La dirigente sindical afirmó que el encuadre del “trabajador independiente” que impulsa el Ejecutivo deja a los repartidores “todavía más lejos de poder reclamar derechos” y consolida un fraude laboral, ya que “dependemos jurídica, técnica y económicamente de las empresas”. En ese marco, aseguró que “la reforma viene a reforzar el abandono total y la irresponsabilidad empresarial”.

Sobre los ingresos, D’Ambrosio precisó que para alcanzar apenas 1.100.000 pesos mensuales un repartidor debe realizar unos 462 pedidos al mes, lo que implica trabajar seis días por semana, al menos ocho horas diarias. “Hay jornadas de 16 horas para llegar a ese número. No es lo mismo estar ocho horas en una oficina que ocho horas pedaleando bajo el sol, sin cobertura de ningún tipo”, subrayó.

Indicó además que el sector cuenta con unos 160 mil trabajadores en todo el país y que el crecimiento del rubro está directamente vinculado al aumento del desempleo y el pluriempleo. “En Rapid, por ejemplo, se habla de un crecimiento del 40% de repartidores entre 2024 y 2025. No es porque sea un gran negocio para los trabajadores, sino porque hay más pobreza y más despidos”, explicó.

Consultada sobre la situación de los trabajadores, señaló que existe un alto nivel de vulnerabilidad social. “Hay jóvenes que tienen su primer empleo en las plataformas, pero también jubilados y trabajadores despedidos de más de 40 años que no logran reinsertarse en el empleo formal. Es un sector totalmente heterogéneo y atravesado por la crisis”, detalló.

Finalmente, D’Ambrosio reclamó frenar la reforma laboral y avanzar en un reconocimiento pleno del vínculo laboral de los repartidores. “Queremos ser reconocidos como trabajadores bajo la Ley de Contrato de Trabajo, con un convenio colectivo propio, cobertura de salud, ART, indumentaria y que las empresas asuman sus responsabilidades. Hoy todo el negocio es redondo para ellas y la miseria es para nosotros”, concluyó.