El turismo se debate entre el crecimiento y la falta de trabajadores, por Martín Rubinetti
- ALERTA!ColumnasSIEMPRE ES HOY
- 23 de septiembre de 2022
- 203
Una madre colombiana abraza a su hija que está a punto de abordar un avión rumbo a Buenos Aires, en búsqueda de un futuro mejor. A la misma hora en el aeropuerto de Ezeiza, una familia pampeana, forma un scrum entre llantos y besos alrededor de su hijo de 22 años que en minutos tomará un vuelo que lo llevará directo a Madrid… aunque no se conocen, los dos jóvenes latinoamericanos abrigan el mismo sueño.
Como todo en la vida, esta postal que se repite en infinidad de familias, tiene dos caras, por un lado una crisis y por el otro una oportunidad.
Lo insólito en este caso, es que la Argentina, haciendo gala de esa construcción casi mítica de que es un país diferente al resto, presenta esas dos caras en una misma moneda. Por un lado, el país atraviesa una crisis económica, política y social extremadamente grave, por el otro, hay una Industria, dinámica, pujante y en continuo crecimiento que aunque suene inverosímil no encuentra fuerza laboral con experiencia para enfrentar este boom de expansión.
Es que la Pandemia empujó al Mundo a vivir un acontecimiento casi dantesco. Por primera vez en la historia de la humanidad, 190 países tuvieron que cerrar sus fronteras de manera simultánea. En la Argentina, donde se vivió una de las cuarentenas más largas, más de 600.000 trabajadores vinculados al turismo y la gastronomía, debieron buscar otras fuentes de ingreso para sostener a sus familias, y ahora que la demanda crece sostenidamente, es muy difícil atraerlos para que regresen al sector.
El último informe de impacto económico del Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), estimó que durante los próximos 10 años en Argentina generará casi 530 mil nuevos puestos de trabajo en el sector. Sólo en los últimos 6 meses, se generaron más de 50 mil puestos formales. La WTTC también pronosticó una tasa de crecimiento anual de casi el 3.5%, más del doble en comparación al crecimiento de la economía total nacional. Estos datos van en sintonía con los informes de EMAE (Estimador mensual de actividad económica) que genera el INDEC, en los que se destacan: a la construcción, la hotelería y la gastronomía como los sectores más dinámicos y de mayor recuperación.
Es por ello que se prevé una contribución de 42,8 billones de dólares al PBI nacional, es decir, un crecimiento de más del 27 % respecto a 2021, por lo que la industria de viajes y turismo llegaría a representar el 8,6 % de la economía nacional.
Pero esté escenario al que se enfrenta la Argentina también se vive en otras partes del mundo. En muchos destinos turísticos de Europa se está explorando la posibilidad de capacitar a refugiados ucranianos para que puedan incorporarse a las plantillas de las empresas turísticas, lo que permitiría a estas familias poder empezar a reconstruir sus vidas y, al mismo tiempo, evitaría un alza desbocada de los costes salariales.
Esta semana en España, se ha dado un hecho histórico, el Gobierno aprobó modificaciones en la Ley de Extranjería. El cambio normativo busca ampliar la contratación en origen, permite trabajar a los estudiantes extranjeros, flexibiliza el impulso de negocios por parte de pequeños emprendedores extranjeros y crea una nueva vía para que las personas en situación irregular logren obtener los papeles a través de la realización de cursos de formación.
Una encuesta realizada recientemente por el Banco de España, señala que la mitad de las empresas de la industria turística, tienen problemas para encontrar mano de obra y que hay 110.000 vacantes que hoy no se pueden cubrir.
Sebastián Bazin, director general de la mayor compañía hotelera de Europa, Accor, indicó la firma que opera en más de 110 países, necesita ya 35.000 trabajadores. Sólo entre Francia, España, Portugal e Italia, se espera un déficit de más 100.000 trabajadores.
Es que aunque suene descabellado, sino no se logra encontrar una respuesta rápida y efectiva, miles de empresas del sector deberán suprimir servicios, e incluso muchas podrían cerrar sus puertas por falta de personal.
Hace sólo dos años, la industria de viajes enfrentaba la mayor crisis de su historia, ahora el sector que ya generó más de 60 millones de empleos en el 2022, y que va camino a contener 333 millones de puestos de trabajo en el mundo, vive una crisis de “crecimiento” que tendrá que resolver estratégicamente si no quiere ralentizar su increíble recuperación.