Música en vivo con Santiago Torricelli y Flor Bobadilla Oliva

El pianista y compositor Santiago Torricelli y la cantante Flor Bobadilla Oliva visitaron La Tarde con Carlos Polimeni (lunes a viernes de 14 a 16hs por AM530) para presentar Para lo invisible, una obra integral que combina música, palabra y emoción. Este viernes 31 de octubre a las 20hs se presentarán junto a la chelista Titi Chapero en el Centro Cultural Borges, con entrada libre y gratuita.

En diálogo con Carlos Polimeni, Torricelli destacó el valor de la educación pública en su formación artística. “La universidad pública y gratuita significa la posibilidad de hacer lo que uno quiere”, señaló el músico, egresado de la Universidad Nacional de las Artes (UNA). En ese sentido, remarcó que su deseo de estudiar piano solo pudo concretarse gracias a la existencia del sistema público: “El Estado me brindó la posibilidad de hacerlo, y eso es muy valorable”.

Más adelante, el compositor reflexionó sobre las desigualdades históricas en el acceso al arte. “Antes solo podía estudiar piano quien tenía una familia que pudiera comprar uno y pagar un profesor”, recordó, y subrayó que aún hoy el camino sigue siendo complejo: “Estudiar música implica no solo tomar clases, sino también trabajar para adquirir instrumentos, libros o incluso pagar el transporte”.

Por su parte, la cantante y actriz Flor Bobadilla Oliva repasó su recorrido formativo entre Misiones, Córdoba y Buenos Aires. “Tuve que irme del lugar donde soy porque no todas las formaciones están en todos lados”, explicó, y celebró haber encontrado en la docencia y en la escena porteña un espacio de crecimiento artístico. Además, adelantó que continúa protagonizando La China Iron, que se presenta los lunes en Buenos Aires: “Hoy mismo tenemos función, después de la radio me voy directo al teatro”.

Finalmente, ambos artistas coincidieron en que Para lo invisible es mucho más que un espectáculo musical: “No se trata de un disco, sino de un proyecto con varias formas posibles”, sintetizó Torricelli. La propuesta, que entrelaza canciones, pausas y arrebatos instrumentales, invita al público a habitar un territorio sensible donde la música se vuelve experiencia compartida.