Milei profundiza su modelo post derrota electoral

La periodista Natalia Salvo analizó en su habitual columna en Caballero de día el modo en que el Presidente ratificó su programa de gobierno tras el revés electoral en la provincia de Buenos Aires, sosteniendo que la gestión avanzó en una transformación jurídica y económica que concentra poder y debilita derechos sociales.

Salvo recordó que Javier Milei había presentado la elección como un plebiscito de su gestión y, pese a la derrota, anunció que no cambiaría el rumbo. “Prometió una autocrítica, pero dejó claro que no modificará absolutamente nada”, señaló la abogada, quien remarcó que ese camino se apoya en tres instrumentos legales: el DNU 70/23, la Ley de Bases y resoluciones ministeriales.

Según su análisis, este andamiaje normativo permitió al oficialismo achicar el Estado en áreas sociales —salud, educación, trabajo— y al mismo tiempo reforzar su injerencia en el plano financiero. “No se trata de desregulación, sino de re-regulación a favor del capital financiero”, sostuvo.

Entre los cambios mencionó la emergencia pública decretada hasta 2025, la derogación de más de 80 leyes, la modificación del derecho de huelga y la instauración del régimen de incentivos a grandes inversiones, que en los hechos “legitima la entrega de recursos estratégicos a cambio de nada”.

Salvo advirtió que, bajo estas facultades delegadas, el gobierno intervino organismos, disolvió programas sociales, cerró medios públicos, favoreció aumentos de más del 180% en la medicina prepaga y flexibilizó la ley de alquileres, habilitando contratos en dólares y sin plazos mínimos. “Arriba las finanzas, abajo el trabajo y la industria: ese es el modelo que Milei decidió sostener después de la derrota”, concluyó.