“Los discursos de odio no son libertad de expresión”

En su habitual columna en el programa Caballero de día, Cynthia Ottaviano analizó los fundamentos de la sentencia por el intento de magnicidio contra Cristina Fernández de Kirchner y advirtió sobre el rol del odio político en la degradación del debate público y el riesgo para la democracia.

Ottaviano puso el foco en los fundamentos del fallo judicial, de más de 500 páginas, dados a conocer el 9 de diciembre, y destacó el llamado de atención que allí realiza la presidenta del Tribunal Oral Federal N°6, Sabrina Namer. Según explicó, la sentencia establece que el ataque no fue un hecho improvisado sino el resultado de un plan premeditado, motivado por el odio político construido en el espacio público.

“La jueza es clara: no se puede dejar de lado que el odio en el discurso público fue una causal necesaria para que el hecho tuviera lugar”, remarcó la periodista, y subrayó que la construcción de un enemigo común facilita el pasaje “de las palabras a los hechos”.

En ese marco, Ottaviano cuestionó la idea de que los discursos de odio estén amparados por la libertad de expresión. “No lo digo yo: Naciones Unidas lo dejó sumamente claro. Los discursos de odio no son libertad de expresión”, afirmó, y señaló que en buena parte de Europa este tipo de prácticas están penalizadas por sus consecuencias históricas.

La columnista advirtió además que la deshumanización del adversario político y la estigmatización de colectivos sociales forman parte de un proceso conocido en la historia argentina. “Antes se hablaba de extremistas o subversivos; hoy directamente se elimina al otro desde el discurso”, sostuvo, al trazar un paralelismo con etapas oscuras del pasado.

Finalmente, Ottaviano llamó a recuperar el pacto democrático y reclamó una agenda activa en el Congreso para prevenir la reiteración de hechos de violencia política. “El respeto por la vida del otro es un valor irrenunciable. Ese respeto empieza a romperse cuando se habilita el discurso de odio”, concluyó.