El origen de las especies – Horacio Verbitsky en El Cohete a la Luna
- ALERTA!El COHETE A LA LUNANoticias
- 26 de enero de 2025
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La principal ilustración de esta nota fue encontrada en unos manuscritos de Charles Darwin. La dibujó uno de sus hijos. Hoy parece una coda al planteo de Javier Milei en Davos, que encomió a Donald Trump, Elon Musk, Giorgia Meloni, Nayib Bukele, Víctor Orbán y Benjamín Netanyahu. Ellos son las especies guerreras eleccionadas para una batalla a muerte con el progresismo, que en inglés se connota por la palabra woke. El naturalista más importante del siglo XIX y su progenie se adelantaron 16 décadas al panorama que hoy ofrece el planeta tierra, ya sea por el título de la obra magna de Darwin acerca del “Origen de las Especies”, como por el carácter bufo de una guerra librada montando peras, nabos, zapallos y zanahorias.
Un anuncio impactante de lo que se avecina fue la imagen de los tecnobillonarios Mark Zuckerberg, Jeff Bezos y Musk en la ubicación más prominente durante la jura de Trump, relegando a los expresidentes, legisladores y personalidades a lugares secundarios. El ex vicepresidente Mike Pence ni siquiera fue mencionado entre los asistentes. Trump lo considera un traidor, porque no se prestó a la manipulación de los resultados electorales hace cuatro años. También es significativa la competencia entre los señores tecnofeudales por la proximidad de Trump. Musk es un ministro sin cartera de su gobierno, encargado de la chainsaw, que podará las ramas excesivas del Estado. Zuckerberg eliminó el control profesional de contenido en las publicaciones de Facebook, y Bezos censuró en el Washington Post, un pronunciamiento pre-electoral en favor de Kamala Harris. Su enorme influencia les parece insuficiente. Ahora aguardan la eliminación de las regulaciones que impuso Biden. La riqueza conjunta de los milmillonarios aumentó en dos billones de dólares en 2024, informó Oxfam, y la riqueza de los diez hombres más ricos del mundo creció en promedio 100 millones de dólares diarios. En cambio, la pobreza global no ha decrecido desde 1990.
Tamices
Tanto en Estados Unidos como en la Argentina, las aspiraciones de sus presidentes deben pasar por el tamiz de las instituciones para convertirse en políticas reales. Los puntos de partida son muy distintos. Trump tiene mayoría en ambas cámaras del Congreso y también en la Corte Suprema de Justicia y le responden 47 de las 50 gobernaciones. Las bancadas de Milei en la Cámara de Diputados y en el Senado son diminutas. Hace meses que sus candidatos a la Corte Suprema están empantanados en la Comisión de Acuerdos del Senado. No le responde ni un gobernador ni un intendente y ni tiene diálogo con su vicepresidenta. Ha gobernado en base a decretos y vetos, lo cual torna muy frágil su consistencia. Anuncia proyectos de ley coincidentes con sus órdenes de batalla en Davos, pero aquí nadie lo toma en serio. En cuanto la economía deje de responder a las fantasías mayoritarias, le pedirán cuentas por esas decisiones unilaterales. El FMI le reclama que el nuevo acuerdo que se negocie pase por el Congreso, como marca la ley vigente, pero Milei teme que no consiga aprobación para incrementar la deuda y medita hacerlo por decreto. ¿Lo aceptará su amiga búlgara? La desesperación por dólares se expresa en la rebaja de retenciones, informada de urgencia luego de tres ruedas en las que el Banco Central no pudo comprar ni un dime de cobre. El gobierno supone que este sacrificio del Tesoro del equivalente en pesos a 800 millones de dólares, acicateará a exportadores a liquidar una parte de la cosecha de este año aun retenida, de unos 3.000 millones de dólares que quedarían en el Banco Central. Por enésima vez, Milei anunció que levantará el cepo. Pero no tiene los recursos imprescindibles para hacerlo sin provocar una corrida letal.
Trump pudo firmar un millar de indultos a quienes en 2021 asaltaron el Capitolio. Lo festejaron entonces en la Rotonda, bajo la cúpula. Trump eligió jurar allí su cargo, en un gesto cargado de simbolismo. No todos los beneficiarios celebraron el indulto. Pamela Hemphill, de 71 años, dijo que lo rechazaba. Condenada a 60 días de prisión y tres años de libertad condicional por su irrupción en el Congreso está avergonzada de haber formado parte de una secta sin darse cuenta. Es mentira que en 2020 le robaron la elección a Trump, dice hoy. El perdón presidencial “es un insulto a la Policía del Capitolio, al estado de derecho y a la nación”. Pero el resto de sus decisiones deberá sortear filtros políticos, judiciales, económicos y de relaciones exteriores. Por lo pronto, ya hubo un recurso de amparo contra la abolición del ius soli.
Lo notable es que el juez federal que suspendió la vigencia de la norma, John C. Coughenour, fue designado por Ronald Reagan. Sentenció que en sus cuatro décadas como magistrado no había visto un decreto tan “descaradamente inconstitucional” como el que niega la nacionalidad estadounidense a quienes nacieron en su territorio, si sus progenitores estaban en forma ilegal en el país.
Ya son 22 los estados con gobernadores demócratas que, junto con madres embarazadas y grupos activistas, presentaron seis demandas arguyendo que el decreto violaba la 14ª Enmienda. Sancionada en 1868, tres años después de concluida la guerra civil, esa Enmienda reconoce la ciudadanía a todas las personas nacidas y nacionalizadas en Estados Unidos. Así garantizó los derechos de los hijos de los esclavos. Como se ve, hay más de una forma de interpretar cómo Make America Great Again.
Los aranceles
Desafíos equivalentes sufrirán los decretos sobre inmigración, impuestos, energía, clima, raza, género, o salud. Además de los tribunales, deberán sortear la resistencia de los gobernadores, que tienen la última palabra en el sistema federal.
Con los aranceles, el límite sólo pueden ponerlo los socios comerciales. Trump ha mostrado la cautela que no tuvo antes de asumir. Había prometido imponer el 10% para todas las importaciones, y 20% para algunas. Desde Davos, el jueves amenazó a China, México y Canadá con su vigencia desde el 1° de febrero, en lo que desde la Casa Blanca se presenta como el principio de una negociación. Causó asombro al decir que estaba listo para “negociar con Xi Ji Ping. Me gusta Xi”. Comenzó por Tik Tok, al revocar su cierre dispuesto por Joe Biden. Ambos se declararon “socios y amigos” y hacer del mundo “un lugar más pacífico y seguro”.
También hay que considerar la reacción del mercado financiero, que Trump sigue con atención. En Wall Street, que se opone a los aranceles, el índice de las 500 mayores empresas que mide Standard&Poors subió, porque “los peores temores no se concretaron”. Un ciudadano de origen extranjero, que ni simpatiza con Trump ni teme ser deportado, porque la Green Card certifica su nacionalización, señaló sobre el discurso del lunes 20: “Fue más moderado que en su campaña, sobre los mismos temas. No es sombrío como el de 2017 y se parece al Morning in America de Reagan. El anuncio sobre los combustibles fósiles es ominoso para el mundo. Pero también dijo que medirá su éxito no sólo por las batallas que gane sino también por las guerras a las que ponga fin, y, tal vez más importante, por las guerras en las que nunca entrará”. Si hubo algo reminiscente del fascismo en este siglo, no fue ninguna decisión de Trump, sino la Patriot Act, de Bush II. Un editorial del Intelligencer concluye que es mejor observar lo que Trump hace que escuchar lo que dice.
45 grados
Concluida la asunción de Trump, Elon Musk realizó un acto celebratorio, en el que se llevó la mano al pecho, dijo que entregaba su corazón y luego extendió el brazo derecho en un ángulo de 45 grados no hacia el frente sino lateralmente. Se dio vuelta y lo repitió hacia otro sector del edificio Capital One de Washington, donde también Trump se había dirigido a varios miles de partidarios. “Mi corazón está con ustedes”, dijo. Musk estaba eufórico por el anuncio presidencial de que Estados Unidos enviaría a un astronauta a Marte, que es su proyecto personal.
En todo el mundo, se señaló la similitud de ese gesto con el saludo nazi. En la Argentina el historiador Ezequiel Adamovsky ironizó: “El hecho de que Elon Musk apoye a partidos neonazis, haga el saludo nazi y sea nazi no debe interpretarse como que es nazi”.
En Madrid, el diario El País consultó a historiadores y a expertos en expresión corporal. Las opiniones estuvieron divididas:
- La historiadora británica Mary Beard afirmó que “dudaría antes de etiquetar el gesto de Musk como un saludo fascista”.
- Javier Torregrosa Viceda, director del Máster de Comunicación No Verbal en la Fundación Empresa Universidad de Alicante dijo que solo puede interpretarse si el gesto fue espontáneo o deliberado. Pero esto no quiere decir que la alusión sea nazi o fascista, sino que posee un contenido simbólico. La repetición solo sería un saludo.
- Para Ana María Cestero Mencera, catedrática de lingüística general y experta en comunicación no verbal de la Universidad de Alcalá de Henares, se trató de un gesto espontáneo de agradecimiento y no un saludo.
En Estados Unidos, la principal organización judía que escruta cualquier manifestación de antisemitismo, la Anti-Defamation League, lo describió como “un gesto raro en un momento de entusiasmo, pero no un saludo nazi”. El propio Musk respondió en forma indirecta. Publicó sendas fotos de Trump y de Hitler tomando agua y posteó en X: “A Elon Musk le gustan los perros. También le gustaban a Hitler”. Ninguna reacción fue tan virulenta como la del presidente argentino:
NAZI LAS PELOTAS
— Javier Milei (@JMilei) January 22, 2025
Elon Musk debe ser uno de los hombres más importantes de la Historia, que esta empujando el progreso humano a ritmos vertiginosos, y siempre ha defendido la libertad en su forma mas pura, para todos.
Compro X en un acto que fue considerado una locura desde el…
Esa nítida amenaza a los supuestos “zurdos hijos de puta”, que deberían “temblar” ante el avance de la libertad, obtuvo una respuesta no menos extrema por parte de Juan Grabois. “Cuidadito porque nadie te votó para tirano, cada acción inconstitucional tuya o de tus ministros o de tu brazo armado va anotándose en la memoria”, dijo. Además lo llamó “facho hijo de puta”, “monito arrastrado” que “se excita por cada maní” que le lanza la “raza aria y la casta trillonaria”. Y lo remató con una frase sombría que curiosamente nadie en el país parece haber interpretado: “A todo Benito le llega su Loreto”, dijo. Loreto es la plaza de Milán donde los partisanos antifascistas orinaron el cadáver fusilado de Mussolini y luego lo colgaron cabeza abajo junto con su amante.
Esta escalada insensata entre un presidente y un precandidato presidencial de la oposición sólo presagia violencia y sufrimiento. Tal vez contribuya a eso la pretendida ingenuidad del jefe de gabinete, Guillermo Francos, quien reinterpretó al presidente: dijo que iría a buscar a los zurdos para discutir con ellos acerca de las bondades del modelo libertario y los errores de quienes lo cuestionan (sic). También dijo que los homosexuales pueden estar tranquilos, dentro de sus casas.
El sinceramiento
Lejos de retroceder, Milei practicó un completo sinceramiento ante el foro empresarial de Davos, al que reclamó autocrítica por su apoyo a las plagas que enumeró. Después de escucharlo se entiende por qué engloba en su enfrentamiento con “la casta” los recortes a la educación, la salud, la niñez, la tercera edad. Encomió a Musk y Trump, citó como fuente de autoridad a la novelista preferida de Maurizio Macrì, Ayn Rand, acusó de propiciar la censura a Pedro Sánchez (a quien no mencionó por su nombre sino como “rojito”), adhirió a la doctrina del reemplazo y presentó a los inmigrantes como una horda de asesinos en defensa del Islam. Exaltó “nuestro espíritu fáustico, inventivo, explorador, pionero, que siempre está poniendo a prueba los límites de lo posible. Espíritu pionero que hoy se ve representado entre otros por mi querido amigo Elon Musk, que injustamente ha sido vilipendiado por el wokismo, en las últimas horas, por un inocente gesto que lo único que significa es su gratitud con la gente”. Agregó que la Argentina se ha convertido en ejemplo mundial de cómo terminar con la inflación y de “decirle la verdad a la gente en la cara y confiar en que entenderá”. La alianza internacional que mencionó ha resquebrajado “lo que parecía una hegemonía absoluta a nivel global de la izquierda woke”.
Woke es la palabra que en inglés comprende a toda forma de progresismo. Este “virus mental”, es la “gran epidemia de nuestra época que debe ser curada” y “el cáncer que hay que extirpar”. La batalla no está ganada, ya que “foros como este han sido protagonistas y promotores de la agenda siniestra del wokismo”. Mientras ello no suceda, “la civilización occidental e incluso la especie humana no logrará retornar la senda del progreso”. Esas “cadenas ideológicas a destruir” incluyen:
- La redistribución de “la riqueza creada por el capitalismo bajo algún esquema de planificación centralizada”
- Una “agenda socialista, pero insidiosamente operando dentro del paradigma liberal”.
- “La siniestra, injusta y aberrante idea de la justicia social, complementada por entramados teóricos marxistas”.
- La premisa fundamental de que la igualdad ante la ley no es suficiente, ya que existen injusticias que deben ser rectificadas, y representan una mina de oro para burócratas con aspiraciones de omnipotencia.
- “La inversión de los valores occidentales. De los derechos negativos a la vida, la libertad y a la propiedad, pasamos a una cantidad artificialmente infinita de derechos positivos. Primero fue la educación, luego la vivienda y, a partir de allí, cosas irrisorias como el acceso a Internet, la televisación del fútbol, el teatro, los tratamientos estéticos y un sinfín más de deseos que se transformaron en derechos humanos fundamentales, derechos que, por supuesto, alguien tiene que pagar” y que “sólo pueden ser garantizados mediante la expansión infinita del aberrante Estado”.
- Feminismo, diversidad, inclusión, equidad, inmigración, aborto, ecologismo, ideología de género, entre otros, son cabezas de una misma criatura cuyo fin es justificar el avance del Estado mediante la apropiación y distorsión de causas nobles.
- El feminismo radical es búsqueda de privilegios. En muchos países “si uno mata a la mujer se llama femicidio, y eso conlleva una pena más grave que si uno mata a un hombre”. Negó que las mujeres ganen menos que los hombres. Lo que pasa es que no acceden a las actividades mejor remuneradas” (estaba implícito que por falta de capacidad).
- “El siniestro ecologismo radical y la bandera del cambio climático”. Un “ambientalismo fanático donde los seres humanos somos un cáncer que debe ser eliminado, y el desarrollo económico poco menos que un crimen contra la naturaleza”.
- Cuando uno argumenta que la Tierra ha tenido ya cinco ciclos de cambios bruscos de temperatura y que en cuatro de ellos el hombre ni existía, “nos tildan de terraplanistas”.
- “La agenda sanguinaria y asesina del aborto, diseñada a partir de las premisas maltusianas de que la superpoblación va a destruir a la Tierra”.
- “La ideología de género constituye lisa y llanamente abuso infantil. [Los gays] son pedófilos” y “están dañando irreversiblemente a niños sanos mediante tratamientos hormonales y mutilaciones”
- “El mérito fue dejado de lado por la doctrina de la diversidad, que implica un retroceso hacia los sistemas nobiliarios de antaño. Se inventan cupos para cuanta minoría se le ocurra a los políticos que lo único que hacen es atentar contra la excelencia de las instituciones”.
- La inmigración masiva no es motivada “desde el interés nacional sino desde la culpa. Como Occidente es la supuesta causa de todos los males de la historia, debe redimirse abriendo sus fronteras a todo el mundo, culminando necesariamente en una colonización inversa, que se asemeja al suicidio colectivo”.
- Quien “cuestiona estas situaciones es tildado de racista, xenófobo o nazi”.
- Al dominar las cátedras de las universidades más prestigiosas del mundo, el wokismo está formando las élites de nuestros países para impugnar y negar la cultura, las ideas y los valores que nos hicieron grandes, lesionando aún más nuestro tejido social, al enseñarles a nuestros jóvenes a sentir vergüenza por nuestro pasado.
Milei manifestó que estas aberraciones crecieron después de la caída del Muro de Berlín, porque “los países libres se empezaron a autodestruir cuando se quedaron sin adversarios por derrotar. La paz nos volvió débiles, fuimos derrotados por nuestra propia complacencia”, con “las creencias que instituciones como esta han promovido durante cuarenta años. Aquí nadie se puede hacer el inocente. Le han rendido culto por décadas a una ideología siniestra y asesina como si se tratara de un becerro de oro y han movido cielo y tierra para imponerla sobre la humanidad.
Esta misma organización y también los organismos supranacionales más influyentes han sido ideólogos de esta barbarie”.
El wokismo “intenta desacreditar a quienes cuestionen estas cosas, primero etiquetándonos para luego censurarnos, si sos blanco debe ser racista, si sos hombre debes ser misógino o miembro del patriarcado, si sos rico debes ser un cruel capitalista, si sos heterosexual debes ser heteronormativo, homofóbico o transfóbico. Para cada cuestionamiento tienen una etiqueta, que luego intentan censurar por vías de facto o de iure”. Milei estigmatizó a un supuesto “Partido del Estado”. Incluye a “las corporaciones privilegiadas, los banqueros que fueron rescatados en las crisis, la mayoría de los medios de comunicación, los centros de adoctrinamiento disfrazados de universidades, la burocracia estatal, los sindicatos, las organizaciones sociales, las empresas prebendarias y todos los sectores que viven de los impuestos que pagan los que trabajan”. Y “la clase política es árbitro y parte interesada en esta repartija, por debajo de diferencias cosméticas entre los distintos partidos que comparten intereses, socios, arreglos y un compromiso inalterable con que nada cambie”. En oposición a ese Partido del Estado encomia al mercado, “un mecanismo de cooperación social donde se intercambian voluntariamente derechos de propiedad”, que no tiene fallas.
Para “recuperar el Occidente del progreso y construir una nueva época de oro”, el Estado debe limitarse “a la defensa del derecho a la vida, a la libertad y a la propiedad. Cualquier otra función que se arrogue será en detrimento de su tarea fundamental y culminará, inexorablemente, en el Leviatán omnipresente que hoy todos padecemos”. El único conflicto relevante es “entre los ciudadanos libres y la casta política”. En todo “el mundo libre hay una mayoría silenciada que se está organizando y en todos los rincones de nuestro hemisferio resuena el eco de este grito de libertad. Estamos frente a un cambio de época, un giro copernicano, la destrucción de un paradigma y la construcción de otro”. Instituciones como el propio foro de Davos, si “quieren pasar de página y participar de buena fe de este nuevo paradigma, tendrán que hacerse responsables del papel que jugaron en estas últimas décadas y reconocer ante la sociedad el mea culpa que se le reclama”.
A los líderes políticos y económicos del mundo, que conducen tanto Estados nacionales como grandes grupos económicos y organismos internacionales les notificó que es momento de salir del agotado guion de los últimos 40 años. “Es momento de animarse a pensar y ser valiente” y abrazar las ideas de la libertad, como hace la Argentina, y Trump “hará en esta nueva Norteamérica”, para “frenar a tiempo un sendero que conduce a la catástrofe”. Concluyó con la propuesta de “hacer a Occidente grande nuevamente”. Parecería que las tapas de Time y The Economist se le han subido a la cabeza y hecho olvidar qué país preside.
Al presidente argentino le gustaría pasar de la teoría a la práctica y dejó trascender la elaboración de leyes que eliminarían distintos resguardos en protección de la minorías que incriminó. La probabilidad de que el Congreso las adopte es ínfima. Su emisión por decreto debería pensarla dos veces, porque afectan a más de la mitad de la población y podrían encender la chispa de un incendio difícil de sofocar. Entre tanto, distrae, para que la discusión pública no pase por la apurada situación económico-social.
La memoria
Un camino más inteligente eligió la actriz y presentadora Mirtha Legrand, quien visitó el sitio de memoria que funciona en el faro de Mar del Plata, donde la marina de guerra instaló un campo de torturas y exterminio. Yo había difundido en mi libro El silencio una entrevista con el sobreviviente de la ESMA Marcelo Hernández, quien contó que, en el marco del “plan de recuperación” ideado por el almirante Emilio Massera, los secuestradores lo llevaron a trabajar como mano de obra esclava a una fiesta en la casa de la principal figura en la historia de la televisión argentina. “Me vistieron bien y me mandaron a sacar fotos. Massera quería regalarle un book para quedar bien con ella”.
Cuando la consulté para el libro, me dijo que sólo vio una vez en su vida a Massera y no recordó el episodio del book ni de las fotos. Pero, en un almuerzo de junio de 2010 contó que su sobrina María Fernanda Martínez Suárez fue secuestrada en 1977 junto con su pareja, Julio Enzo Panebianco. María Fernanda es hija del director de cine José Martínez Suárez, que era el hermano de la actriz de Los martes orquídeas. Lo repitió casi palabra por palabra ante quienes la recibieron en ese museo, hostigado por los recortes de personal y presupuesto.
Mirtha pidió ayuda al marino que era interventor del Canal 13, pero no la ayudó “porque todo el mundo tenía miedo”. Le dijo “ni te metas, esto es peligrosísimo”. Consiguió un contacto con el ministro del Interior, el general Albano Harguindeguy. Dos días después del allanamiento y el saqueo en el domicilio de Malabia 2591, por un grupo de tareas del Ejército, “a mi sobrina la liberaron. Al marido no. Nunca más supimos de él. Mi sobrina cree que estuvo en Palermo, porque escuchaba pasar los trenes, y la liberaron cerca de la General Paz. Al muchacho lo torturaron muchísimo. Julio se llamaba, nunca más supimos de él. Gracias a que yo era conocida y famosa pude salvarla, porque cuando la liberaron le dijeron: ‘Te salvaste porque sos la sobrina de Mirtha'”. María Fernanda contó su historia ante la CONADEP en 1984 y en el juicio al general Jorge Olivera Róvere en 2010. Panebianco tenía 23 años, era empleado de la DGI y fue asesinado en un enfrentamiento fraguado, el 18 de marzo de 1977, en Parque Patricios. La tía de su esposa no lo olvidó.
El hallazgo de la nieta 139 anunciada por Abuelas de Plaza de Mayo constata que no es la única.