Jorge Elbaum realizó su columna en programa Jugo de Limón (AM 530 – Somos Radio, lunes a jueves de 20 a 22 horas) dónde explicó por qué el fallo contra Cristina Kirchner representa un hecho de gravedad institucional
“Me parece importante tratar de pedagogizar, con relación al sentido común cooptado por la derecha, y más allá de hacer un análisis de algunos capítulos jurídicos de este escándalo, que es la decisión de la Corte Suprema. Es clave que entendamos que este es el resultado de una operación mediática para que mucha gente en nuestro país crea que Cristina es culpable”, remarcó.
Con esa afirmación,el periodista abre una reflexión sobre el entramado de intereses políticos, judiciales y mediáticos que confluyeron en uno de los procesos más polémicos de los últimos años: “En este caso hay una montaña de irregularidades que son escandalosas, yo contabilicé al menos siete. Comenzó con una denuncia de Javier Iguacel que decía que había obras públicas que en Santa Cruz no se habían hecho, tras una auditoría se demostró que se habían hecho, pero este fue el impulso inicial para llamar la atención”, indicó.
La causa se sostuvo a pesar de las pruebas que contradecían sus premisas iniciales: “Se dijo que había sobreprecios, se demostró que era falso. Las obras estas no fueron dispuestas por el Poder Ejecutivo, sino por el Congreso. Ante esto, el macrismo dispuso una auditoría, que volvió a demostrar que no había sobreprecio, pero no se tuvo en cuenta porque se caía la causa”, enumeró.
“Todo esto se hizo en connivencia con las grandes cámaras empresarias de este país, Magnetto incluido. Decidieron cooptar operadores judiciales que ejercieron una parcialidad manifiesta, entre ellos los que fueron a jugar al tenis con Macri a la quinta de Olivos, que tenían que ver con el expediente y tendrían que haber renunciado”, apuntó Elbaum.
Y agregó: “Se violó el principio básico de culpabilidad, porque todos los testigos afirmaron en el juicio que Cristina Kirchner nunca impartió directivas a fines de beneficiar algún contratista. Con ese solo elemento, el fiscal no podría haber hecho la acusación que hizo”.
Por último, remarca un hecho de enorme gravedad institucional: “Cuando las audiencias ya habían terminado, los fiscales apelaron y agregaron chats que estaban en otro expediente, algo que es escandaloso y ningún cortesano lo podría permitir”, manifestó.
Para escuchar la columna completa de Jorge Elbaum en Jugo de Limón, ingresá acá:
