Pablo González, El secretario general de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) de Villa Constitución, Santa Fe, Pablo González, denunció la falta de políticas económicas que impulsen el desarrollo productivo y advirtió sobre las graves consecuencias que atraviesa el sector metalúrgico.
“Venimos viviendo el cierre definitivo de la obra pública y el freno a cero que puso el gobierno con la economía”, señaló González al inicio de la entrevista, remarcando el impacto negativo que estas decisiones tienen en la industria y el empleo.
Uno de los ejemplos más alarmantes de esta situación es la suspensión de mil trabajadores en la planta de Acindar, ubicada en Villa Constitución. “Con respecto a la suspensión de 1000 empleados en Acindar, si esto no mejora vamos a hablar de despidos”, advirtió el dirigente sindical. Además, recordó que “fuimos la única siderúrgica que el año pasado paró”, lo que refleja la compleja situación que atraviesa la industria.
González también cuestionó la postura de la Confederación General del Trabajo (CGT) frente al contexto actual. “Está muy quieta, ya que resolvió la mayoría de los problemas que tenían”, sostuvo, marcando una distancia con la conducción de la central sindical.
Asimismo, criticó la falta de reacción de los sectores populares ante el avance de la Ley Bases. “Mientras se desarrolló la Ley Bases, el país tendría que haber estado parado de punta a punta”, sentenció.
El dirigente también se refirió a la crisis social y económica que afecta a miles de trabajadores y sus familias, señalando que “hay mucha gente que no puede costear los gastos de una prepaga”, lo que expone las dificultades que enfrentan los asalariados en el actual contexto de ajuste.
Finalmente, González resumió su preocupación con una frase contundente: “Hay una frialdad absoluta”, dejando en evidencia la falta de respuesta del gobierno frente a la crisis que afecta a los sectores productivos y a los trabajadores del país.